domingo, 23 de diciembre de 2012


Adviento y Navidad en el Ciclo C 
Una fe verdadera nos complica mucho la vida
José Luis Cortés

 La semana de la Navidad hará que cuestionemos nuestro grado de Encarnación, y hasta qué punto sufrimos (y nos alegramos) por ser cristianos 



La fe pone en marcha un compromiso (DOMINGO: "Lo que ha dicho el Señor se cumplirá"; es la tercera vez que leemos este evangelio durante el Adviento) 
y nos incita a ir por "delante del Señor para preparar sus caminos" (LUNES).


Recibimos nuestra fuerza de la plenitud de Jesús (MARTES: "De su plenitud todos hemos recibido") 
para hacer frente a las consecuencias de ese compromiso, que no es baladí: Esteban fue apedreado por su fe (MIÉRCOLES); 
Juan y Pedro tuvieron que correr para creer (JUEVES); 
José tuvo que huir a Egipto (VIERNES)...

Y es que Jesús fue y sigue siendo un "signo de contradicción" (SÁBADO: "Para que se pongan de manifiesto los pensamientos de muchos corazones").


La semana de la Navidad hará que cuestionemos nuestro grado de Encarnación, y hasta qué punto sufrimos (y nos alegramos) por ser cristianos.

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