jueves, 8 de enero de 2015

Tierra Santa 1. 

Una historia rica y explosiva: 

Israelitas, palestinos

Xabier Pikaza


Esa tierra que llamamos “santa” desde diversas perspectivas (judía, cristiana, musulmana) ha tenido y tiene muchos nombres, que no sólo recogen su dura y riquísima historia plural, sino que sino que evocan un reto explosivo, entre culturas, políticas y pueblos, llamados a convivir (por historia, por religión y familia...), pero que puede estallar y convertirse en guerra sin remedio. Éstos los tres nombres principales de esa tierra:

‒ Es la Tierra de Canaán, es decir de los “comerciantes” cananeos, hermanos de sangre de los fenicios, también comerciantes y parientes de los sirios, expertos (tanto el nombre de Canaán como el Fenicia parecen significar “tierra de púrpura”, donde se tejen y reciben color los vestidos, que se venden entre Egipto y Mesopotamia). Éste es nombre primero, y quizá el mas adecuado para el conjunto de esta tierra.
‒ Es la tierra de Israel, nombre puesto por los “conquistadores” (repobladores, recreadores) de religión monoteísta, luchadores de un Dios llamado Yahvé (desde el siglo XIII-XI a.C.) que desarrollaron allí la más fantástica de las aventuras religiosas de la antigüedad occidental, y quizá de todos los tiempos. Así quieren llamarle hoy a toda aquella tierra los judíos creadores del Estado de Israel (a partir del año 1948).
‒ Es la tierra de Palestina, nombre tomado de los filisteos que se apoderaron de parte de la misma tierra (sobre todo en la franja costera del entorno de Gaza y de otras cuatro grandes ciudades), casi al mismo tiempo que los israelitas (siglo XIII-XI a.C.). Éste es el nombre que impusieron a toda la tierra los romanos a partir de las guerras judías del I-II d.C. (sobre todo tras el 135). Éste es nombre que los árabes actuales quieren dar a la tierra en la actualidad.
Viví en esa tierra por un tiempo (año 1981), en la Casa de Santiago, con Florentino Díez, geógrafo y arqueólogo, biblista y teólogo, y sobre todo amigo, que enseñó a conocer e interpretar lugares y tiempo. Con su Guía de Tierra Santa (Estella 2012) en vuelto el año pasado (2014), para recorrer de nuevo, con Mabel y con el FAM de Einkaren, los espacios, los recuerdos, los entornos.
A ellos, a Florentino García y a E. Pinto de Einkaren, de Einkaren, dedico esta reflexión primera sobre la tierra “santa” de cananeos, israelitas y palestinos. No tengo soluciones, pero puedo ayudar a entender la situación esperanzada, pero tensa y explosiva, en que nos hallamos.
(Imagen: La foto del libro muestra en primer lugar la Cúpula de la Roca: Mezquita de Abrahán para los musulmanes, templo de Salomón para los judíos, que lloran en el muro que está debajo, aquí invisble. Al fondo se ve la cúpula azul de la Iglesia de la Resurrección de Jesús).

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http://blogs.periodistadigital.com/xpikaza.php/2015/01/08/p362609#more362609

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