sábado, 31 de enero de 2015

Carta de Dios a Maduro ¿Quién proveerá?

Xabier Pikaza


Al presentar el otro día la “Memoria y Cuenta” del año 2014, Nicolás Maduro, presidente de la República de Venezuela (a quien llamaré Abraham M., por razones que verá quien siga leyendo), evocó la difícil situación por la que atraviesa el país.

En ese contexto, anunció medidas económicas fuertes, pidiendo a los venezolanos mucho sacrificio, pero apelando como Abraham al Divino Creador con una palabra de "fe comprometida": ¡Dios proveerá!.
Ésta es una de las palabras más esperanzadas e hirientes (abismáticas y manipulables) de toda la historia de la Biblia. Está tomada deGen 22, donde se dice, a modo de parábola, que el mismo Dios mandó a su preferido Abraham, diciéndole que fuera con su hijo Isaac (¡su único hijo legítimo, engendrado tras larguísima experiencia de esterilidades y fracasos!) hasta el monte Moria (¡Jerusalén!), para sacrificarlo allí sobre el altar de piedras.
Dios y Maduro, Abraham e Isaac
Dios mismo le había dado el hijo, y con el hijo todo aquello que podría tener y desear sobre la tierra, para disfrutar con él. Pues bien, ahora que tiene al hijo y con él su vida entera,Abraham escucha la voz de Dios que le dice: ¡Vete al monte y ofrécemelo en sacrificio!
La historia añade que Abrahán se levantó muy de mañana, tomó un cuenco con fuego en una mano y con la otra un gran cuchillo de sacrificar, cargó llena suficiente sobre el asno, y se puso en camino… Llegado al monte, dejó el asno a los criados, puso la leña sobre el hombro de su hijo, y con el fuego en una mano y el cuchillo en otra caminaron ambos hasta la cumbre fatídica, donde preparó el altar para el sacrificio. En este contexto se sitúa la frase cita de Maduro:
Isaac le dijo a su padre: -- Tenemos el fuego y la leña, pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?
Abraham respondió: -- Dios proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío 

La historia resulta conocida, y me servirá para situar en su contexto las palabras de Maduro, que como Nuevo Padre Abraham lleva a su hijo Venezuela al sacrificio, dispuesto a matarle con su gran cuchillo y a quemarle en holocausto sobre el altar recién edificado, pues “Dios proveerá”.

No soy quién para juzgar la política del Sr. Maduro, ni el uso que hace de las palabras de Abraham, en la situación mas desesperada de su vida, cuando el Dios/Destino parece ordenarle que mate a su hijo. Es como si dijera; “Yo tengo que pedirte un gran sacrificio, Venezuela, pero Dios proveerá”. Interprete cada uno esa circunstancia y palabra de Maduro; para ayudarle a opinar me atreve a presentar los tres “excursos” que siguen.

(1) Una carta de Laureano Márquez, politólogo y humorista venezolano (enviada por https://www.facebook.com/FUNDAMERCED?fref=ts, Caracas 24, 1, 2015).

(2) Una pequeña reflexión bíblica mía, sobre el caso de Abraham y el sacrificio de su hijo, con la palabra “Dios proveerá” (¡y proveyó un cordero!)

(3) Una reflexión histórico/teológica. El gesto de Abraham, con la respuesta de Dios ha sido y sigue siendo uno de los temas principales de la reflexión de occidente, desde los rabinos judíos hasta Kant y Kierkegaard.

Buen fin de semana a todos, con Venezuela querida, entre Maduro y Marquez, dispuesta a ser sacrificada.

Para seguir leyendo:
http://blogs.periodistadigital.com/xpikaza.php/2015/01/30/carta-de-dios-a-maduro-con-la-disputa-de

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