jueves, 21 de julio de 2016

¿CÓMO REZAR EL PADRENUESTRO
en un mundo SIN PADRE?

a) Por las NEGATIVIDADES de la vida muchos perdieron confianza en la fe
Para ellos Dios no ha sido experimentado como padre. Pareciera, que nos guía la “fatalidad” y nos dirigen unos dinamismos ciegos.
La fe nos hace acoger la bondad de Dios juntamente con la maldad del mundo. Dios sigue siendo Padre nuestro a pesar de la aflicción. 
El padrenuestro supone la fe que vivió Jesús, quien confió en Dios hasta en la máxima desesperanza de la cruz y se mantuvo fiel a pesar de la contradicción, la persecución, la condena.

b) UNA SOCIEDAD SIN PADRE.
La sociedad patriarcal queda sustituida por la sociedad sin padre o por una sociedad que desempeña funciones anónimas y está dirigida por fuerzas impersonales, entonces, ¿qué sentido tiene rezar el padrenuestro?
Hay que distinguir entre nuestro ordenamiento patriarcal y el principio antropológico del padre. 
La inalienable función del padre como propulsor de la primera ruptura de la intimidad madre-hijo y la introducción de este último en lo social-realidad.


c) NIETZSCHE y FREUD.
Su crítica a la religión del padre la fundamentan en un des-velamiento de los disfraces que asumen dos impulsos de la existencia humana: el deseo y el miedo. El deseo de protección y los mecanismos para superar el miedo pueden crear una máscara bajo el cual en-cubrirse. La persona religiosa; puede vivir una "ilusión": pensando que está relacionándose con Dios, con su gracia, con su perdón, su auxilio y su salvación, en realidad se encuentra sólo domesticando sus propios impulsos básicos.
La fe exigida por la oración del padrenuestro intenta liberarnos de los impulsos arcaicos del deseo y del miedo, que nos hacen esclavos y nos impiden decir con libertad —como hijos y no como “niños”— ¡Abba, Padre! San Pablo insiste en que "cuando éramos menores de edad estábamos esclavizados por lo elemental del mundo" —hoy diríamos sometidos al deseo y al miedo—, pero ahora ya somos hijos adultos (ver Gal 4,3-4). La relación que establecemos con Dios-Padre no nace de una dependencia infantil y neurótica, sino de una autonomía y de una decisión libre.
Jesús renuncia al sueño de la omnipotencia infantil, de querer usurpar los privilegios del Padre, reconociéndose y aceptándose como Hijo.

c) LA CRÍTICA FEMINISTA.
¿No podríamos llamarle también madre nuestra que estás en los cielos? 
“El Dios de la Biblia no es la proyección de una mentalidad patriarcal. El es Padre, pero es también el Dios de la ternura y del amor maternal”. (Pontificia Comisión Bíblica, 1993).
El Antiguo Testamento nos revela también el rostro materno de Dios: "Como a un niño a quien su madre consuela, así os consolaré yo" (Is 66,13; ver Jer 3,19). El papa Juan Pablo I, dijo que Dios es Padre y, todavía más, Madre.


¿CÓMO REZAR HOY EL PADRENUESTRO?
Con el mismo espíritu de Jesús. Jesús no tuvo una vida idílica, al contrario, bien cargada de conflictos que culminaron en su crucifixión. 
Y en medio de los desgarros rezaba a su Padre, no para pedirle que le librase de las pruebas, sino suplicándole la fidelidad a su opción liberadora.



Saludos cordiales.

Juan Manuel

No hay comentarios:

Publicar un comentario